El compresor de CO₂ de tornillo es fundamental en diversas industrias como la del petróleo, la petroquímica, el gas natural, el carbón, los productos químicos, la síntesis de amoníaco, la generación de energía, el acero y la fermentación de alimentos. Se utiliza para la recuperación y presurización de gas de dióxido de carbono, siendo esencial en la producción de CO₂ de grado industrial o alimentario.

Este compresor también juega un papel crucial en proyectos de CCUS (Captura, Utilización y Almacenamiento de Carbono), apoyando iniciativas de sostenibilidad. Equipado con lubricantes de grado alimenticio y separadores de aceite de varias etapas, asegura un bajo contenido de aceite en la salida de gas CO₂, lo que cumple con los estrictos estándares de seguridad alimentaria, al mismo tiempo que mantiene un funcionamiento eficiente y confiable en todos los procesos industriales.

El compresor de helio es crucial en aplicaciones como la recuperación de helio a partir de gas natural, la investigación de superconductividad criogénica y la producción de hidrógeno líquido en procesos criogénicos. Este compresor está diseñado para manejar fluctuaciones en la presión de succión, la presión de descarga y el caudal de admisión durante su operación.

Debido al pequeño tamaño molecular del helio y su alta propensión a las fugas, el compresor se construye con características avanzadas de diseño y técnicas de fabricación especializadas, que aseguran un funcionamiento eficiente y la minimización de pérdidas de gas. Estas innovaciones no solo optimizan el rendimiento energético, sino que también contribuyen a la confiabilidad de la unidad, convirtiéndola en una solución ideal para aplicaciones industriales y de investigación que requieren alta precisión y rendimiento.